¿Quieres saber qué ver en Roma? Si quieres conocer una de las ciudades italianas con más historia y encanto del mundo, te presentamos una lista con 50 lugares que no puedes perderte en tu visita a la ciudad eterna.
En esta guía encontrarás los monumentos imprescindibles -no puedes decir que has visitado Roma si no los conoces- así como otros lugares, fuentes, plazas e iglesias. Tanto si dispones de poco tiempo como si vas a visitarla durante una semana o más, te aseguramos que las vas disfrutar.
Qué ver en Roma. Edición por ItaliaViajar. Original por Vvoennyy. Envato
Lugares imprescindibles que ver en Roma
El Coliseo
El Coliseo, un enorme anfiteatro que podía albergar a 65.000 espectadores en la época romana, es la atracción turística más popular de Roma. Los gladiadores luchaban entre sí o contra animales salvajes en su arena. Las enormes ruinas del Coliseo permiten a los visitantes ver las gradas, el teatro y las zonas subterráneas del mayor anfiteatro de la antigua Roma. Debido a la gran afluencia de viajeros, se aconseja encarecidamente comprar las entradas para el Coliseo con antelación.
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El Foro Romano
El Foro Romano fue el centro más poderoso del Imperio Romano. En una visita al Foro Romano puedes recorrer las excavaciones romanas del parque arqueológico con antiguos templos, arcos de triunfo, salas de mercado y otros edificios significativos construidos por los emperadores.
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El Palatino
La colina del Palatino, situada junto al Foro, contiene las excavaciones de las residencias imperiales. Además del Palacio Imperial, disfrutarás de unas vistas impresionantes desde la colina hacia el Foro Romano.
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El Mercado de Trajano
El Mercado de Trajano, es un complejo semicircular de más de 150 tiendas y oficinas construido durante el reinado del emperador Trajano (100-112 d.C.) y situado junto al homónimo Foro de Trajano. Los mercados estaban situados en la colina del Quirinal, en Roma, y consistían en un complejo de cinco pisos donde se vendían productos hortícolas, especias, aceite y vino.
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Las Termas de Caracalla
Los restos de unos enormes baños romanos (termas) que datan del siglo III d.C. son conocidas como las «Termas de Caracalla». En su día el mayor centro de baños de Roma, con un tamaño con el que podía albergar a 2.500 visitantes, pero fue gravemente destruido por los terremotos y los saqueos para obtener materiales de construcción. No obstante, estas excavaciones arqueológicas son un claro indicio del tamaño de los baños del emperador Caracalla en aquella época.
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El Arco de Constantino
El Arco de Constantino es el mayor y mejor conservado arco de victoria romano, con casi 26 metros de altura, 21 metros de alto y 7,5 metros de profundidad. El Senado lo construyó en el año 312 para conmemorar el triunfo del emperador Constantino sobre Majencio en el Puente Milvio. El arco del triunfo estaba decorado y ornamentado con muchos relieves de templos antiguos. El Senado y el pueblo de Roma dedicaron este arco en señal de triunfo a Constantino por haber liberado al Estado de la tiranía y esclavitud.
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La Fontana di Trevi
La «Fontana di Trevi», o Fuente de Trevi, es quizás la fuente más famosa del mundo, y definitivamente la más famosa de Roma. Neptuno, el dios del mar, está representado montando su carro en el mar en esta fuente barroca del siglo XVIII situada en la plaza de Trevi. Un viaje a Roma no está completo sin lanzar una moneda a la Fontana di Trevi, significa que quien la lanza «volverá un día a Roma».
Se trata de una fuente, pero la englobamos como monumento imprescindible porque su belleza y detalles no tienen parangón.
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El Panteón
El Panteón es una de las estructuras mejor conservadas de la antigua Roma. Aunque no se sabe con certeza qué función cumplía el edificio en aquella época, el emperador Adriano fue el encargado de su finalización, y posteriormente en el año 608, el emperador Bizantino Focas lo donó para su uso religioso al Papa Bonifacio IV. Aparte de algunas tumbas notables (el pintor Rafael y algunos reyes italianos), la iglesia actual presenta una cúpula (oculus) notablemente amplia y abierta. En tu visita a Roma, puedes visitar el Panteón de forma gratuita.
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La Basílica de San Pedro
La Basílica de San Pedro, también conocida como «Basílica del Vaticano», es el corazón sagrado de la Iglesia católica y la residencia del Papa. La gran basílica del Estado soberano de la Ciudad del Vaticano, construida en el lugar donde se cree que está la tumba de San Pedro, está situada en la epónima Plaza de San Pedro. El baldaquino de Bernini y «La Piedad» de Miguel Ángel son algunas de las obras maestras de la Basílica de San Pedro, pero también puedes entrar en la cripta, que contiene 148 tumbas de Estado papales. Para evitar las largas colas, planifica tu visita a San Pedro con antelación.
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La Capilla Sixtina y los Museos Vaticanos
Los papas también amasaron una vasta colección de arte a lo largo de los años, que incluye artefactos romanos y varias pinturas. En los Museos Vaticanos, 54 salas lujosamente decoradas ofrecen una visión general de los tesoros artísticos de la Iglesia Católica.
La Capilla Sixtina es sin duda el centro de atención de muchos turistas. La capilla, que cuenta con maravillosas obras de arte de Miguel Ángel, es más conocida por los cónclaves en los que se elige al nuevo Papa. Esta es la visita con las colas más largas debido al elevado número de viajeros. Es importante comprar las entradas con antelación para saltarse la cola y evitar dos horas de espera bajo un sol abrasador.
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Villa Borghese y la Galería
El nombre de «Villa Borghese» hace referencia al parque más impresionante y grande de Roma. La finca del cardenal Scipione Borghese, rica en piedras, se desarrolló en su día en torno a la villa del mismo nombre. Es propiedad de la ciudad de Roma desde 1903 y sirve de parque público. La «Galería Borghese», un museo que alberga la extensa colección de arte privada de la familia Borghese, también se encuentra en el parque. En la galería se pueden encontrar pinturas y esculturas de Caravaggio, Rubens, Bernini y Leonardo da Vinci.
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El Trastevere
El antiguo barrio común de Roma está situado en la orilla opuesta del Tíber. El Trastevere es un barrio tradicional italiano donde puedes pasear por un laberinto de calles estrechas y descubrir antiguos edificios medievales. El barrio cobra vida por la noche, gracias a sus numerosos restaurantes y bares.
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Castillo de Sant’Angelo
El mausoleo del emperador Adriano, el Castel Sant’Angelo, data del siglo II. El Papa Pío II hizo instalar en su cima una enorme estatua de bronce del Arcángel Miguel, después de que éste se apareciera aquí en el año 590 y pusiera fin a la gran epidemia de peste. Al estar unido al Vaticano por un túnel, el Castillo de Sant’Angelo también formaba parte de las defensas romanas y era una posición por la que los papas podían escapar.
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Ostia Antica
Una excursión de un día a las excavaciones arqueológicas de la antigua ciudad portuaria romana de «Ostia Antica» es una forma maravillosa de alejarse del bullicio de Roma. Este parque arqueológico, situado a unos 30 kilómetros al oeste de Roma, está muy bien comunicado por tren, y los visitantes pueden visitar tranquilamente 100 hectáreas de excavaciones romanas, así como las vistas del antiguo puerto de Roma.
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Las plazas que ver en Roma
En tu visita a la ciudad eterna observarás multitud de plazas espectaculares, de grandes tamaños y con edificios históricos, fuentes e iglesias por las que merece la pena pasar y disfrutar.
Plaza de San Pedro
Sin duda una de las Plazas más importantes y conocidas del mundo. En ella se encuentra la basílica de San Pedro, y es el lugar en el que se reunen miles de fieles cristianos cuando realiza audiencias el papa.
Terminada en 1667, es una de las más grandes de Italia con 35.300 metros cuadrados, no tiene parangón en el mundo. La Plaza de San Pedro tiene unos 240 metros de largo por 340 de ancho, y desciende 2,46 metros hacia la base. Esto no sólo proporciona una visión más clara de la multitud, sino que hace resaltar el obelisco egipcio situado en el centro de la plaza.
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Plaza Navona
La Plaza Navona es una de las plazas más llamativas de Roma. La forma alargada de la plaza se remonta a su propósito original como arena de atletismo en la antigua Roma. Varias fuentes, incluida la «Fontana dei Quattro Fiumi» de Bernini, un llamativo obelisco y las excavaciones del antiguo estadio de Domiciano son algunas de las atracciones de la plaza. La Plaza Navona es también una plaza bulliciosa con músicos callejeros, cafés y terrazas.
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La Plaza de España
La Escalera de España es un conjunto de 135 escalones situados a los pies de la iglesia francesa «Trinità dei Monti». La Escalera de España conduce a la Plaza de España, donde se encuentra la elaborada fuente de Bernini. La Escalera de España, del siglo XVIII, se ha convertido en una atracción turística, con una espectacular vista de Roma desde su cima.
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La Plaza Venecia
El monumento al primer monarca de Italia, Vittorio Emanuele II, se encuentra en la plaza Venecia y es una de las estructuras más llamativas de Roma. La estructura, también conocida como «Altara della Patria», conmemora la unificación de Italia. Los romanos la conocen también como «la máquina de escribir» o «la tarta de bodas». La gigantesca estructura blanca alberga un museo y la Tumba del Soldado Desconocido, custodiada por dos hombres armados.
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Piazza del Popolo (Plaza del Pueblo)
La Piazza del Popolo es una amplia plaza neoclásica de Roma que se construyó en el siglo XIX para servir de entrada a los turistas que accedían a la ciudad desde el norte. Las dos iglesias similares construidas una frente a la otra, la puerta de la ciudad «Porta del Popolo», un gigantesco obelisco egipcio, y las escaleras desde las que se puede ascender a la colina del Pincio para disfrutar de una maravillosa vista, son todos lugares notables en la plaza.
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Plaza del Campidoglio
La Plaza del Campidoglio está situada en las elevadas alturas de la Colina Capitolina, se extiende entre el Palacio Nuevo, el Palacio Conservatorio y el Palacio Senatorial, y, por tanto, justo debajo del Ayuntamiento de Roma. Tiene un llamativo mosaico en el suelo, compuesto por una estrella artísticamente formada, con una impresionante estatua ecuestre de Marco Aurelio que emerge en el centro de la estrella. Uno de los lugares más importantes de la ciudad.
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Campo de’ Fiori
Las fachadas de las casas de la plaza Campo de’ Fiori brillan con flores rojas, púrpuras, amarillas y azules, contribuyendo al ambiente romántico de este bullicioso mercado. Comerciantes, visitantes y transeúntes se reúnen aquí cada día bajo la atenta mirada del filósofo italiano Giordano Bruno, cuyo monumento se eleva varios metros por encima de la plaza, para regatear en los animados puestos del Mercado de Fiori.
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Plaza Colonna
La Piazza Colonna es una amplia plaza cercana al Palazzo Chigi, cuyo nombre se debe a la gran columna que se encuentra en el centro de la plaza, de 29 metros de altura. Los éxitos de Marco Aurelio sobre los germanos y los sármatas estaban ilustrados en esta imponente columna. Junto a la columna se encuentra la fuente de mármol de Giacomo della Porta, realizada en el año 1800 y que representa diferentes delfines.
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Piazza del Quirinale
La plaza está situada en el corazón del barrio romano de Trevi, cercana de la Fontana di Trevi. La Piazza del Quirinale, con imponentes vistas al obelisco flanqueado por dos palacios (papal y república), ofrece una vista panorámica de Roma, que se extiende hasta la imponente cúpula de la Basílica de San Pedro.
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Plaza de la República
El gran pórtico neoclásico que domina la Piazza della Repubblica es más un lugar para disfrutar de paso que para quedarse. Las antiguas Termas de Diocleciano se construyeron aquí en su momento. En el centro se encuentra la Fuente de las Náyades, flanqueada por cuatro ninfas acuáticas que parecen chapotear en el agua, con esculturas de Mario Rutelli que representan al espíritu del agua luchando contra un tiburón.
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Plaza Barberini
En la antigua Roma, la zona de la Plaza Barberini era un barrio de villas de clase alta. Tras el saqueo de Roma en el año 455, el barrio permaneció en barbecho hasta el siglo XVII. Con el tiempo, el barrio se transformó según los diseños del renombrado arquitecto barroco Gian Lorenzo Bernini. Destaca la Fontana del Tritone, en el centro de la plaza, siendo una creación del famoso escultor.
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Las iglesias que ver en Roma
En Roma hay más de 900 iglesias. En tu visita, puedes parar en cualquier iglesia que encuentres y echar un vistazo, porque vas a encontrar auténticas joyas ocultas. No obstante, en esta lista te mostramos las más destacadas.
Basílica de Santa María la Mayor (Della Neve o Maggiore)
La Basílica Papal de Santa María la Mayor es la principal iglesia mariana de Roma y una de las cuatro iglesias papales. La iglesia del Esquilino, que data del siglo V, conserva muchos mosaicos originales y un llamativo techo dorado. Se dice que incluso hay astillas del belén de Jesús enterradas bajo el altar.
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Basílica de San Clemente de Letrán
Esta basílica, dedicada al Papa Clemente I, tiene uno de los interiores más exclusivos de Roma. La basílica de San Clemente es única, ya que a lo largo de los años se han construido muchas iglesias una encima de otra. En tu visita, podrás conocer los orígenes de la iglesia a través de las excavaciones de una iglesia del siglo IV, una iglesia oculta del siglo I y los cimientos romanos.
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Archibasílica de San Juan de Letrán
La singularidad de la Basílica de Letrán como basílica de la diócesis de Roma es que, en sentido estricto, la «San Giovanni in Laterano» es la iglesia más significativa de Roma. Es la catedral oficial de la diócesis de Roma y una de las cuatro basílicas papales. La llamativa fachada con esculturas de Alessandro Galilei ha ido modificando a lo largo de los años la estructura de la iglesia de estilo barroco.
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Basílica Santa Sabina
La iglesia de Santa Sabina es una de las basílicas cristianas más antiguas de Roma, ya que fue fundada entre los años 422 y 432. Se encuentra a unos 400 metros al suroeste del Circo Máximo, en la colina del Aventino de Roma. La iglesia se construyó en el lugar donde se encontraba la casa de la mártir Sabina, que fue destruida hacia el año 125.
Se utilizó el orden corintio para montar 24 columnas de mármol a ambos lados de la nave central. Pedro de Iliria figura como constructor y arquitecto del edificio. La puerta de madera, del año 432, se considera la más antigua de las iglesias cristianas en uso. Los cuadros tallados representan temas bíblicos, y sólo 18 de los 28 originales han sobrevivido hasta nuestros días.
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Basílica de San Pablo Extramuros
Después de la Basílica de San Pedro, San Pablo Extramuros (en italiano: San Paolo fuori) es la mayor basílica de Roma. Se la conoce como Basílica Ostiense por su proximidad a la Vía Ostiense, que conduce a Ostia. Tras el fin de los Tratados de Letrán, la basílica se ha convertido en una posesión extraterritorial de la Santa Sede, y es una de las siete iglesias de peregrinación de Roma.
El emperador Constantino inició la construcción de la basílica de San Pablo a principios del siglo IV. Según la tradición eclesiástica, la basílica de San Pablo se construyó fuera de las murallas, en el lugar donde fue enterrado el cuerpo de San Pablo. Pese a quedar bastante destruida por un incendio de 1823, entrar a la misma sigue resultando impresionante. Visita totalmente recomendable y muy accesible en metro.
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Basílica de Santa María de Los Ángeles y Los Mártires
La basílica de Santa Maria degli Angeli e dei Martiri es una iglesia ubicada cerca de la estación Termini, en la Piazza della Repubblica.
La construcción de la iglesia comenzó en 1560 bajo la supervisión de Miguel Ángel. Se construyó sobre los restos de las Termas de Diocleciano.
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San Pietro in Vincoli
Una de las iglesias más antiguas de Roma es la Basílica de San Pietro in Vincoli. Fue consagrada por el Papa León Magno en el año 431, utilizando las ruinas de una antigua estructura del siglo II (440-451).
Después de varios proyectos de reconstrucción entre los siglos VIII y XV, el Papa Julio II hizo que la iglesia se diseñara en estilo renacentista, que todavía se ve hoy, en 1503.
Se trata de uno de los secretos mejor guardados de Roma, ya que en ella encontrarás el Moisés de Miguel Ángel, una de las obras más importantes del artista.
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Iglesia de San Andrés del Quirinal
La iglesia de Sant’Andrea al Quirinale se encuentra ubicada en el Quirinal de Roma y es conocida como una de las perlas de la arquitectura barroca, debido a su interior de mármol rosa. Fue construida siguiendo los diseños de Bernini en los años 1658 a 1670.
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Las fuentes de Roma
Ubicadas por toda la ciudad, muchas de ellas en algunas de las plazas más relevantes. Se trata de auténticas obras de arte que merece la pena conocer. Llenas de detalle y de historia, son una parada obligatoria. Te mostramos algunas de las más destacadas
Fuente de Los Cuatro Ríos
La Fuente de los Cuatro Ríos, (en italiano Fontana di Fiumi) es otra joya del artista Gian Lorenzo Bernini, situada en el centro del antiguo hipódromo de la Plaza Navona. La Fuente de los Cuatro Ríos, construida entre 1648 y 1651, es un emblema de la Era de los Descubrimientos, ya que simbólicamente lleva a los cuatro ríos más conocidos de los cuatro continentes: Europa, África, América y Asia. Desde la antigüedad, no sólo todos los caminos conducen a Roma, sino que también los grandes ríos han rendido sus respetos a la metrópoli del Tíber en este estilo barroco, según Bernini. La Fontana dei Quattro Fiumi también habla de la pretensión de autoridad del Papa, que se refleja en el simbolismo del mundo del agua, así como en los animales y plantas que adornan la fuente.
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Fontana dell’Acqua Paola
El Papa Pablo V (1605-1621) ordenó la construcción de la colosal fuente «Paola» en el punto más alto de la colina del Gianicolo entre 1610 y 1614. El proyecto fue encargado a Giovanni Fontana (1540-1614), junto con Flaminio Ponzio (1560-1613). La Fontanone se inspiró en la Fuente de Moisés y se le asignó la forma de un arco de triunfo.
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Fontana dei Tritoni (Fuente de los tritones)
La Fontana dei Tritoni, o Fuente de Tritón, está situada en la plaza Bocca della Verita, frente al templo de Hércules. Fue construida en 1715 según el estilo del arquitecto Carlo Bizzaccheri, a quien el Papa Clemente XI Albani encargó el diseño de la fuente. La pila principal tiene forma de octógono con bordes cóncavos, a juego con la estrella de ocho puntas que es el emblema heráldico de la dinastía Albanis del Papa.
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Fuente de la Barcaza
La Fuente de la Barcaza es una fuente mundialmente conocida cuyo nombre alude a su inusual forma. La Fontana della Barcaccia, se asemeja a una barca hundida que parece estar varada a los pies de la formidable Escalera de la plaza de España. Al estar rodeada por un estanque poco profundo, el agua continúa brotando de su interior, desbordando el muro de piedra y alcanzando el barco.
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Fuente de las Náyades
Cada día, mientras el tráfico de la ciudad ruge a su alrededor, la fuente de las Náyades se entregan al juego de luces y agua en medio del imponente telón de fondo palaciego de la plaza de la República. La fuente de las Náyades se distingue por su enorme forma circular que se alcanza varias alturas. Fue realizada en 1901. Las Náyades, ninfas, junto a otras deidades de la naturaleza y seres legendarios de la mitología romana, habitan la parte superior.
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Las cuatro fuentes
Las Cuatro Fuentes son una serie de fuentes que se instalaron en 1588. Están ubicadas en la intersección de la Via Quirinale y la Via delle Quattro Fontane, las fuentes están integradas cada una en una esquina de un edificio.
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Fontana del Tritone (Fuente del tritón)
La Fuente del Tritón, diseñada a mediados del siglo XVII como fuente de agua potable para los residentes del barrio, destaca por su esplendor barroco. Cuatro delfines emergen sobre una pila de agua artísticamente formada, y sus aletas sostienen una concha. Sobre la concha, un imponente tritón se sienta y escupe agua al aire desde su cuerno. La familia romana Barberini donó la fuente, por lo que su escudo de armas puede verse entre los delfines. En este lugar también se encuentra una tiara, así como el anillo de Petri.
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Fuente de Las Tortugas
La Fuente de la Tortuga está escondida en la pequeña plaza Mattei, en el corazón de la antigua ciudad romana, pero es una joya renacentista con sus figuras juguetonas y su trabajo de bronce en filigrana. La Fuente de la Tortuga se construyó en 1588 y desde entonces es el punto central de la plaza frente al Palacio Mattei.
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Otros lugares destacados en Roma
Pirámide Cestia y Porta San Paolo
La pirámide Cestia, ubicada junto a la Porta San Paolo, es un mausoleo construido para Cayo Cestio Epulón. Realizado entre los años 18 y 12 a.C., mide 30 metros de largo y más de 36 metros de altura. A su lado se encuentra la Porta San Paolo, del siglo III, que forma parte de la muralla aureliana en el sur de la ciudad.
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La Boca della Verità
La boca de la Verdad, un disco de piedra con cara humana, es uno de los lugares más turísticos de Roma. Miles de visitantes acuden cada año para contemplar el antiguo disco del pórtico de la iglesia y dejarse cautivar por su leyenda.
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Catacumbas y Vía Apia
La Via Appia es una de las vías de acceso más antiguas de Roma, que se remonta a la época de los romanos. La vía, pavimentada con anchos adoquines y bordeada de cipreses, se construyó para facilitar el comercio y el transporte de tropas de la época. Al estar situado fuera de las murallas de la ciudad, hay varias catacumbas y tumbas a lo largo del camino. La bicicleta es la mejor manera de ver la Vía Apia y sus lugares de interés.
La «Casa de Oro» de Nerón, Domus Aurea
Las excavaciones de la «Casa de Oro» de Nerón se conocen como Domus Aurea. Desde 2014, los visitantes tienen la oportunidad de ver las ruinas de este enorme palacio de una forma única. En una visita guiada, se utilizarán gafas de realidad virtual para ver cómo debía ser el enorme palacio en el pasado. Dado que todavía se están llevando a cabo extensas obras de renovación durante toda la semana, la visita sólo es accesible los sábados y domingos. Aunque es un lugar menos conocido, sigue siendo una de mis recomendaciones personales. Hay que reservar con antelación.
Domus Romane
Bajo el Palacio Valentini, junto al Foro de Trajano, se encuentran las ruinas de algunas casas y termas romanas. Te cansarás de tantas piedras y excavaciones arqueológicas después de unos días en Roma. La Domus Romane es muy recomendable para ello. Durante el paseo, las animaciones y efectos visuales dan vida a las excavaciones. Ésta fue una de las agradables sorpresas de mi reciente visita a Roma. Es mejor reservar la Domus Romane con antelación, ya que sólo se permiten grupos pequeños.
Palacio Doria-Pamphilj y Palacio Colonna
En Roma hay una serie de espléndidos palacios urbanos de los siglos XVI y XVII. Estos palacios son opulentos y magníficos, con impresionantes colecciones de arte privadas de esculturas y frescos. En tus vacaciones en la ciudad, puedes ir al menos a un palacio y sus galerías relacionadas. En mi opinión, hay dos palacios que son especialmente dignos de mención; la Galería Colonna es muy recomendable un sábado por la mañana, mientras que la Galería Doria Pamphilj debe visitarse los demás días.
La Cripta de los Capuchinos
La Cripta de los Capuchinos es un lugar especialmente extraño en Roma. Los huesos y cráneos de casi 3600 frailes capuchinos se han introducido en la tumba para crear una especie de obra de arte en cinco capillas bajo la «iglesia». Aprenderás más sobre los frailes capuchinos en el museo antes de visitar las extraordinarias criptas.
¿Qué hacer en Roma?
Por si no tienes suficiente con los lugares que visitar, te recomendamos algunas cosas que puedes hacer para cerrar una experiencia memorable en la ciudad.
Degustar uno de los exquisitos tiramisús
No puedes visitar Roma y marcharte sin probar sus famosos tiramisús. Algunos de los locales más famosos donde podrás degustar este postre casero de cacao y café son: Pompi Tiramisú, Two Sizes y Tiramisú Trastevere. Puedes elegir cualquiera de ellos porque son un acierto seguro.
Disfrutar de una puesta de sol desde el monte Aventino
Situado en el Monte Aventino, el Parco Savello o de Giardino degli Aranci, otorga algunas de las mejores vistas de Roma. Si tenéis ocasión de acudir en la puesta de sol, disfrutaréis de una estampa única de tonos cálidos que la luz transmite a toda la ciudad. Suelen acudir músicos callejeros a tocar en vivo, convirtiendo la escena en un momento memorable.
Callejear por la ciudad
Siempre es recomendable pasear entre sus calles, pudiendo descubrir un monumento o fuente espectacular en cada esquina. Roma es una ciudad llena de vida y de historia, una ciudad para pasearla, vivirla y respirarla.
Recorrer Roma en bicicleta
Ir en bicicleta por Roma es una forma fantástica de ver la ciudad. Alquila una bicicleta o, mejor aún, haz un recorrido por Roma con un guía local. En sólo medio día, puedes visitar varios monumentos históricos y escuchar historias fascinantes sobre el pasado de Roma. ¡Es muy recomendable! Como los recorridos tienen éxito, recomendamos reservar con antelación.
Mapa con lugares que visitar en Roma
Esperamos que esta guía con los lugares más recomendados que ver en Roma haya sido de utilidad.